Anoche ví una estrella fugaz. Creí que ya no existían. Hace más de 10 años que ví la última. Fue caminando por V. Gomez (Buenos Aires), anoche desde un balcon en J. M. Moreno (Madrid).
¿Será sólo suerte o dedicar tiempo a contemplar el cielo cuando nadie lo hace?
La mayoria de la gente jamás a visto una; y no es que no se pueda vivir sin ello, pero contemplar esa luz divina es un segundo único en el tiempo.
No puedo hablar técnicamente de lo que es una estrella fugaz o por que se produce, pero si puedo hacer un resumen de mi percepción:
Uno mira al cielo, pensando en algo o en alguien, no pimporta la dirección, la estrella se ilumina justo donde apunta la mirada. El cielo parece más oscuro en su contraste. La estrella se enciende como la cabeza de un fósforo al ser frotado. Se mueve, brilla mucho, y desaparace.
Es un segundo aparte.
Es, literalmente, la luz en la oscuridad.
Pone en movimiento la quitud del cielo.
Parece un regalo de los que nunca se olvidan.
El cielo se lo muestra a todos. Se puede estar rodeado de gente, pero no todos lo ven. Tener la suerte de haberla visto me hace sentir especial.
Así pasó tu vida en la mía.
Con luz propia, con mucho brillo.
Fue una época aparte.
Fuiste, literalmente, la luz en momentos oscuros.
Fue el regalo de mi vida que nunca voy a olvidar.
No todo el mundo pudo verte como yo, y haberte vivído de esa manera me hace sentir más que especial.
Mientras brilló tu luz se iluminó mi vida.
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Después por costumbre, cabala o por las dudas, es ese momento se bloquean los pensamientos habituales para intentar pedir un deseo.
Anoche en ese instante sólo pensé en tu Nombre. Como si sólo nombrarte se resumieran todos nuestros recuerdos, nuestros secretos, y todo lo que te extraño.
Ojalá la luz de la estrella haya leído mi pensamiento que era tu Nombre.
Ojalá que en tu nombre se interpreten todas mis intenciones.
Ojalá este mito fuese cierto y se cumpla mi deseo:
ENCONTRARTE DE NUEVO!
